manolithops.es
Noviembre de 2014
Hace casi cuatro meses publicamos en esta Web una discusión titulada "Sobre las diferencias de cultivo de los Lithops según su especie" (puede verse en el siguiente enlace: www.manolithops.es/ml04_029.htm ). Se trataba de una serie de preguntas y respuestas que hacíamos a medias entre Alejandro, un compañero de afición, y yo mismo.
Aquel texto sólo era una discusión informal sobre el tema que se citaba en el titulo, e incluso sobre otros temas que fueron surgiendo sobre la marcha.
Me consta que Alejandro ha continuado profundizando sobre el asunto durante los últimos cuatro meses. Como fruto de ese trabajo vamos a publicar aquí el texto que Alejandro ha preparado para matizar y completar lo que en aquel momento hablamos sobre la diferencias de cultivo de los Lithops según su especie.
A continuación se reproduce el artículo preparado por Alejandro. Pero antes me gustaría dejar claro que se trata de un texto escrito por él en exclusiva. Mi única labor ha sido formatearlo para poder reproducirlo en la Web. El contenido del artículo que se muestra a continaución reproduce integramente el texto original escrito por Alejandro.
Al final del artículo se incluye una nota de agradecimiento. La reproduzco para respetar el deseo de Alejandro, pero en mi opinión no era necesaria. Quiero insistir en que todo lo que viene después de este párrafo es el fruto de su trabajo. Me consta que Alejandro ha puesto todo su empeño en elaborar este interesante artículo, por lo que le doy la enhorabuena y le agradezco que haya querido compartirlo con todos nosotros.
Conocer el hábitat de una especie de Lithops es esencial
para entender sus peculiaridades respecto de otras especies.
Un buen método de cultivo es el que tiene en cuenta la biología (características naturales) de la planta. La biología está determinada por el hábitat en que la planta ha evolucionado. Conociendo el hábitat, entendemos la biología, y entonces podemos aplicar un buen método de cultivo.
Si una especie o grupo de especies se distribuyen por unas zonas en particular, es porque las condiciones ambientales de esos lugares son adecuadas para ellas y porque es allí donde se desarrollan: nacen, viven, se reproducen y mueren. Si una planta tiene problemas con otras condiciones ambientales, y por lo tanto no se desarrolla bien con ellas, es porque no ofrecen lo que la biología de la planta requiere.
Por lo tanto, las alteraciones en el método de cultivo ocurren por la correspondiente variación de la biología de la planta, lo que a su vez sucede por la correspondiente variación en su hábitat. De esta manera, si conocemos el hábitat lo suficiente como para darnos cuenta de que el problema se debe a que las condiciones ambientales que nosotros proporcionamos a la planta difieren en un grado apreciable de las que existen en él, podemos saber qué hacer y esperar una buena reacción.
Antes de seguir, es importante poner algunos ejemplos de la relación entre las características naturales de los Lithops y su hábitat. La observación conjunta de estos dos aspectos da lugar al método de cultivo:
Existe una evidente relación entre las características naturales de los Lithops y su hábitat.
Esta relación tiene una clara repercusión en la forma de cultivo de cada especie.
Sin olvidar que las plantas piedra pertenecen a un mismo género, Lithops, lo cual quiere decir que sus características naturales son muy parecidas, no son idénticas, y como hemos dicho, las diferencias vienen determinadas por el hábitat en el que se distribuyen cada especie o grupo de especies.
Así, si conocemos su hábitat podemos comprender cuánto se diferencian unos Lithops de otros. Por ejemplo, porqué florecen antes o después, o son más o menos resistentes a la aridez.
Hablemos del Lithops optica 'Rubra'. ¿A qué se debe que su floración se produzca más tarde, y por lo tanto hay que seguir regando hasta enero o febrero (en el hemisferio norte)?
En su hábitat natural (hemisferio sur), los Lithops florecen cuando se da el máximo de lluvia y la temperatura empieza a descender. En la mayoría de las zonas de distribución sucede en los meses de marzo-abril-mayo, pero en las zonas de lluvias en invierno (Sudáfrica occidental y muy al suroeste de Namibia) ocurre unos dos tres meses después; por eso el reloj biológico del Lithops optica 'Rubra', que está asentado en parte de esos lugares, está retrasado y entonces florece más tarde.
Como podemos observar, las condiciones ambientales necesarias para la floración - máximo de lluvias y descenso de temperatura - se producen más tarde en las zonas de distribución del Lithops optica 'Rubra' (de mayo a julio, cuando ya ha entrado el invierno) (en el hemisferio norte sería, más o menos, seis meses después).
En el caso del las regiones por donde se distribuye el Lithops gracilidelineata, de floración temprana, las lluvias ocurren antes (de enero a marzo), y por eso su reloj biológico está adelantado y cuando lo cultivamos florece primero que sus compañeros.
Respecto a la resistencia a condiciones extremas, el clima varía a lo largo de las diferentes zonas de distribución. Hay especies que crecen en zonas desérticas, como el norte de Namibia, mientras otras lo hacen en zonas de estepa, como las que ocupan el centro del país de Sudáfrica. Por lo tanto hay Lithops más sensibles al exceso de agua o al riego en el periodo inadecuado, y por otra parte, más resistentes a una insolación intensa, y otros que soportan mejor un régimen de riegos más frecuente y son algo más delicados con unas condiciones demasiado duras.
El hábitat del Lithops karasmontana recibe menos lluvias que el de otros Lithops. Además está clasificado como BW: árido.
En cambio, el hábitat del Lithops terricolor recibe más lluvia que otros Lithops. Además está clasificado BS: semiárido.
En realidad es más sencillo de lo que parece. El conocimiento del hábitat sirve más bien para actuar con más conocimiento de causa-efecto que para llevarlo a la práctica de forma minuciosa. Lo realmente importante es conocer muy bien las reglas del método de cultivo de los Lithops y aplicarlas estando atentos a la evolución de la planta. El sentido común también es un gran aliado. Por eso espero que esta información os haya resultado útil sobre todo para comprender mejor las reacciones al medio que muestran los Lithops; este texto es más orientativo que práctico.
A la hora de aplicar las diferencias en el hábitat de los Lithops en su cultivo debemos actuar muy a grandes rasgos, pues las plantas siempre poseen adaptabilidad, las condiciones ambientales no deben ser idénticas, solo similares.
Con un buen cultivo las diferencias se suelen manifestar con factores propios de cada especie no tan relacionados con el clima local al que las plantas estén expuestas, por ejemplo la floración. Pero es casi imposible aplicar un cultivo perfecto, y éstas sí que se ponen de relieve cuando nos acercamos a los extremos.
Cultivando Lithops se aplica por lo general el mismo método a todas las especies del género, pero en un momento dado puede suceder que una especie en concreto reaccione mal sin que se manifieste ningún motivo. La única opción que nos queda es pensar en si estamos cultivando de forma incorrecta: demasiado sol, poca agua, mucho calor...
Es importante decir que no todos los problemas sin causa aparente suceden por esto. El mal estado de salud de un Lithops también puede deberse, por ejemplo, a un Ph demasiado ácido o alcalino del agua o sustrato, o a una infección en las raíces que de primeras no se ve.
Es por esto que el artículo va dirigido a personas que ya saben cuidar bastante bien a sus Lithops y han leído información sobre el cultivo de crasas en general. Saben y controlan lo que hacen, y piensan en los cuidados que recibieron las plantas en el pasado y en lo que podría suceder en el futuro. Alguien que recién empieza no conoce muy bien como se producen las cosas y le sería difícil determinar si el problema se debe a unas condiciones ambientales incorrectas para la especie de Lithops o a otra causa.
Si bien la geografía del hábitat se compone de innumerables factores (geomorfología, hidrografía, climatología...), no es necesario conocerlos todos. Es suficiente con comprender las condiciones ambientales en que se desarrolla la planta a grandes rasgos, teniendo en cuenta dos factores principales: el régimen de lluvias y la clasificación climática (desértico, tropical, templado...).
Nunca podremos disponer del sustrato original, ni siquiera es necesrio que lo imitemos,
pero siempre será buen tenerlo en cuenta.
He aquí una manera de conocer bastante bien el clima de las zonas por donde se extienden los Lithops:
Conocer el origen de un Lithops es esencial
para poder aplicar todo lo descrito en este artículo.
"Quiero agradecer a Manuel toda la información que ha publicado en su página. Sin su puntual, acertada y atenta ayuda personal no podría haber llegado a escribir esto. Así que, Manuel, ¡esto no solo es trabajo mío! Un afectuoso saludo".